El Intento...

Suspiros que matan, que hacen a una persona cada día más debil, así se ejemplifica el amor, y no a una persona, sino a la vida. No se siente capaz de llegar al final, confía en sí mismo, pero no sabe si lo suficiente, y cree que la vida espera cada vez más de él, y hace un intento, cada día para dar lo mejor de sí. LLegan los días malos, no puede más, sólo quiere rendirse, y sabe exactamente cómo hacerlo, pero algo en su interior le dice que no lo debe hacer, entonces se arrepiente, y aparecen los días buenos, como una luz interior, que cambia cada movimiento de su vida, lo hace renacer, volver a confiar, y es entonces cuando este suspira y se declara enamorado de la vida...