jueves, 1 de noviembre de 2007

Vicente Sandoval (L)

Es cuático como pasa el tiempo, como uno puede lograr quedarse pegado con un sólo tema tanto tiempo, cinco años y un poco más en mi caso.
Vicente Benjamín Sandoval Quezada, nació un 14 de septimbre en el año 1997, un nuevo integrante de esta familia tan particular como lo es la mia. El cuarto & último hermano, con el que compartí grandes alegrías en mi vida. Este pequeño siempre fue muy llorón, muy feliz, se notaba que no podía vivir sin su familia, estoy segura que a todos nos amaba, me lo dijo muchas veces además. Se enamoró de mi mejor amiga de la infancia, y de su hermana también; soñaba con entrar algún día al colegio, admiraba profundamente a su hermano Sebastián, peleaba quizás día por medio con su hermana Verónica, aunque era feliz si ella quería en algún momento del día jugar con él, y además acompañaba en todo momento a su hermana Camila. A su papá Sebastián lo quería mucho a pesar de todo, y de su mamá Isabel no se despegaba. Toda persona que conoció al Vicente puede afirmar que todo lo que digo es real.
Cuando ocurre este horrible accidente, nos cambió la vida a todos los Ramírez Sandoval Quezada; la primera en actuar es Verónica, buscando un lugar en la vida donde pudiera realizarce tranquilamente decide vivir con su papá Tito Ramírez, además, por problemas complicados de explicar, Sebastián debe vivir con su padre Sebastián, quedándo tan sólo Isabel y Camila, que deciden vivir con Nilda & Carlos. Fueron años difíciles, no sé cuál de las dos lo pasó peor, los recuerdos nos invadían en todo momento del día, Vicente fue claramente la persona más maravillosa que puede haber pasado por nuestras vidas. Cada día se afiataban más Isabel y Camila, se acompañaban y se apoyaban una con otra, sin embargo, por desición propia, Camila decide acompañar a su hermana viviendo con su papá.
Sin hablar en tercera persona, han sido unos 5 años muy difíciles, un cambio radical en mi vida, cuando estábamos todos, mis grandes problemas eran no ver tan seguido al Tito, y ver triste a mi mamá por los problemas con el Sebastián grande, pero cuando falleció mi hermano, sentí que mi vida también había fallecido, hubo una gran separación en mi familia, todos estábamos invadidos en tristeza, y no sabíamos qué rumbo tomar para retomar nuestras vidas. Realmente ha sido lo más difícil por lo que he tenido que pasar en mi vida, el crecer & madurar en tan poco tiempo, hacerme cargo de cosas que no correspondían a mi edad, el cargar con un peso de culpa como todos los demás, es fuerte para una niña de once años; no hay día en que no piense en él, no hay día en que no mire la foto de él que está al lado de mi cama y diga en mi mente, te amo vicente, no hay día en que no me arrepienta de haber peleado con él, o con la verónica, y no haber estado en ese momento para ayudarlo, es difícil enfrentar la muerte de un ser tan querido como lo era él para mi, era más que un hermano, era gran parte de mi vida. Los que eran parte de mi vida esos años, presenciaron mi transformación de chica a grande en ese tiempo. Hasta el día de hoy siento impotencia, rabia, pena, y a la vez cariño, alegría y amor debido al Vicente. Estoy segura que no hay persona más Linda en el mundo que él, es tan lindo acordarme de cosas que hizo o dijo, y contarlo, y que los demás se lo imaginen, me siento tan orgullosa de él, admiro la fuerza que ha tenido mi mamá para seguir con su vida con tanta pena que guarda, y me siento una gran persona por el sólo hecho de haberlo conocido.
Se dice que cada año, el Primero de Noviembre, se celebra el día de todos los santos, es por esto que habló de él, del pequeño que aparece a la derecha de la pantalla en blanco & negro, Vicente Sandoval, el realmente es un santo. Lo amé, lo amo y siempre lo amaré.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me imagino qe tu hermano era super bkn como tu dices qe era, me lo imagino con una sonrisa en la cara cada vez qe tu me hablas de el... muy lindo lo qe escribiste camila, pucha hace tanto tiempo qe no nos vemos, ojala pasen mas cosas como la de ahora qe me rei como "cuatrotresmil horas!" wuajajajajajjaa... te qiero estupida! ven a verme

Anónimo dijo...

que triste lo que escribiste